lunes, 26 de abril de 2010

ahora que las ideas estrujan el último retoque de maquillaje en el que se guardan despensas y descompuestos impuestos, ahora que los tacones tocan a mi cuerpo, a la puerta de los talones que pretenden ignorar su camino, ciegos pasan los intentos de mi lengua por reconstruir las oportunidades de las palabras.


Las liebres escapan del cazador, yo voy, esclava, en una jaula de comerciales no baratos aunque sin contenido. En la televisión la mujer mata y quita la piel, hará algún truco con lo que queda de las liebres, los roedores escalan en pirámides de poder, yo camino casi descalza sobre la alfombra roja. Cerraré los ojos hasta así poder morir.

Pero mi piel, mi carne, mi corazón sólo serán desperdicio, una imitación como las mujeres que espían los otros ángulos de las revistas que nos dicen cómo ser.

Ahora que las ideas estrujan el último retoque de maquillaje se me ocurre llorar y salir a correr entre la hierba, comer alfalfa y desvestirme de este traje de mujer infeliz.

jueves, 22 de abril de 2010

3

Hace mucho tiempo escribí una serie de cosas que estaban destinadas a ser un libro, lo publiqué y algunos dijeron que les gustaba, dieron su aprobación y llegué a creer, algo ingenua, que después de algunos años podría recuperar todos esos escritos, un ciclo en mi vida, y ... formar un libro
Hoy sé que eso es mentira, que todas esas ideas se fueron a la basura y que lo que me queda es guardar silencio y morir.